Hoy sostuve una conversación en la que buscamos algo que sea universalmente agradable. No dijimos bueno, no. Agradable. Y claro, algo unversalmente desagradable. Contamos los factores de morbosos, pesimistas, fetichistas, y sus respectivos etcéteras.
Llegamos a la conclusión de que algo universalmente agradable es poder rascarte, y universalmente desagrable es el poder rascarte.
Por otro lado, algo muy cercano, creo, a lo universalmente agradable es la imagen que aquí está. No sé cómo se cita un blog, pero creo que se entiende mi idea.
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